Prometeo encadenado
Prometeo encadenado de Esquilo se centra en el Titán Prometeo, castigado por Zeus por haber robado el fuego a los dioses y entregárselo a los hombres. Prometeo se rebela contra Zeus. La voz de Prometo se alza como una voz enfrentada al poder despótico. Una voz que favorece el bien común y ama el saber sobre todo lo demás.
“La traducción de Irigoyen es de una fidelidad al original casi insultante, sin que ello suponga menoscabo alguno del empleo de un bello, elegante y poético castellano… Una obra magistral, en una no menos magistral traducción.” (Carmen Vilela, Ramón Irigoyen traduce espléndidamente a Esquilo).